Cuando el mundo se mueve rápido se abren oportunidades gigantes para la innovación e incluso el surgimiento de proyectos inéditos.

Pandemia mundial, incertidumbre económica, tensión social, fake news virales, cierre de fronteras, limitación a la libertad de movimiento, entre otras cosas. Todo esto hizo que veamos un presente duro y el mañana oscuro.
Pero cuando hay oscuridad, también hay luz. Hay innovación, resiliencia y siempre existe una salida para seguir adelante.
Estamos en la tercera ola de la virtualización, era digital, o cuarta revolución industrial.

Más allá del nombre que se le pueda dar a este presente que nos toca vivir, lo cierto es que el futuro del trabajo ha llegado porque hoy, es el mañana de nuestro ayer.

Hace poco leí en The Future of Jobs Report 2020 un artículo interesante sobre el nuevo paradigma laboral: «humanos y robots se repartirán por igual los trabajos en 2025», según el informe, los robots desplazarán a 85 millones de seres humanos de sus puestos laborales.
Si bien se preveía que la automatización iba a implementarse en forma acelerada, la noticia suena desesperanzadora, ya que para muchas personas significará la pérdida de empleo.
Aun así, siempre existe un lado positivo, en este caso, no hay que perder de vista que cuando el mundo se mueve así de rápido también se abren oportunidades gigantes para la innovación, la creatividad, la reinvención e incluso el surgimiento de proyectos inéditos que de una u otra forma inyectan vigor en los brazos del mundo laboral.
El hecho es que hoy estamos en condiciones de afirmar que el segundo nombre de internet es “oportunidades”, pero eso sí, hay que estar atentos para capturarlas.

DECISIONES CRUCIALES

Para meditar sobre el fututo del trabajo ¿no?, y a su vez accionar en algunas decisiones que resultan cada vez más cruciales como ser:
¿Qué carrera estudiar? ¿Qué trabajo buscar? ¿Cómo reinventar eso que hacemos y ¿Cómo reinventarnos a nosotros mismos?

La otra pregunta que muchos nos hacemos es ¿qué repercusión trae este cambio de era en la economía y en el trabajo?, opto por una respuesta en plural, muchas repercusiones y algo rígidas.
Recordemos que el bloqueo inducido por la pandemia sumado a la recesión global del 2020 creó una perspectiva muy incierta en el ámbito laboral y aceleró la llegada del futuro laboral, un nicho del que se venía hablando desde hace más de una década.
Revisemos algunas de las características más sobresalientes:

1. Si el trabajo (a realizar) es físico, significa que lo puede hacer una máquina, entonces va a tender a ser reemplazado por ella.
2. Si es un empleo que requiere de un alto componente de pensamiento racional también está en el ranking de los que tienden a ser reemplazados por robots.
3. Varios empleos que conocemos, podrían dejar de existir como consecuencia de la Tercer Ola de la Virtualización.
4. Algunos empleos mejor remunerados hoy, no existían hace algunos años.

Por otro lado, no es ninguna novedad el hecho de que vivimos inmersos en un sistema globalizado; lo que sí podría resultar novedoso es el refinamiento de ese sistema de globalización a través del mundo virtual.
Virtualidad que ha hecho posible que, dependiendo el tipo de trabajo que se lleve a cabo, pueda ser realizado por otra persona de forma remota desde cualquier lugar del planeta y casi siempre por menos de la mitad del salario que correspondería en el país de origen.
El ejemplo más resonante es el de la mano de obra india. Estas cosas ya están ocurriendo sin que una sola partida masiva de robots haya aterrizado en ninguna parte.
Pero si se quiere ver el lado positivo sobre el futuro del trabajo, también existen cualidades insustituibles y en este sentido, los puestos y empleos que están (y estarán) en mejores condiciones de competitividad y remuneración serán aquellos que respondan a demandas vinculadas a la mayor creatividad destacándose la capacidad de aportar ideas frescas y renovadas.
También la percepción, es decir, todo lo relacionado con el manejo de los sentidos, de la interpretación.
Y por otro lado la empatía, esa cualidad que refleja la habilidad humana de apreciar los sentimientos ajenos como si fueran propios.
En estos ámbitos las máquinas no pueden vencer al hombre.
A continuación, comparto un breve listado con las destrezas humanas consideradas imprescindibles, es decir, que no pueden ser reemplazadas por máquinas (hasta ahora) y que, además, constituyen una demanda que va en alza en lo que va del siglo XXI.

DESTREZAS HUMANAS IMPRESCINDIBLES

Inteligencia lingüística, por ejemplo, redactores digitales, copywriters, correctores.
Espacial, pueden ser diseñadores web o gráficos.
Musical, aquí entran los compositores, productores, arreglistas.
Interpersonal, incluye el espectro de terapeutas y coach que te puedas imaginar.

Y, en el último puesto se sitúan las habilidades físicas (las que decíamos que tienen mayor tendencia a ser reemplazas por máquinas y a la vez obtienen menos remuneración).

CÓMO LIDIAR CON LA REALIDAD

a. No competir en aquellas áreas donde las máquinas nos superan.
b. Más que nada, se trata de orientar nuestra formación (profesional, académica, de oficio, de mejora continua, etc.) hacia cosas que nos generen pasión, pero también en las que ningún robot sea capaz de competir.
c. Hay que destacar sobre la mayoría (ser la mejor versión de uno mismo) “Destacar” bien podría ser una palabra clave para toda la población laboral activa.
Y es que, según previsiones de la ONU, el mundo en el 2050 tendrá 9.700 millones de habitantes aproximadamente, así que, lo mejor que pode-mos hacer es mejorar nuestras propias habilidades y diferenciarnos de la media.
En conclusión, aquellos que se atrevan a mejorarse a sí mismos y mejorar sus habilidades van a estar en condiciones de responder a las altas demandas y, por otro lado, los nichos donde la competencia es menor porque el campo es más virgen facilitará que sea posible destacar más rápido.

EMPLEOS EMERGENTES DEL PRESENTE Y FUTURO DEL TRABAJO

Se llaman trabajos emergentes a todos aquellos que no existían antes del 2008. Dado que son bastante recientes todavía tienen un bajo nivel de competencia y salarios por encima de la media.
El éxito profesional en los sectores laborales emergentes es directamente proporcional a la capacidad de adaptación a las nuevas tecnologías, a la innovación y a los cambios ¿cómo te ves en ese sentido?
Dentro de mi actividad profesional, hay una actividad que disfruto hacer y tiene que ver con ayudar a emprendedores a encontrar la forma de reinventarse y reinventar lo que hacen.
A continuación, encontrarás una miniguía que recopilé para que te animes a analizar y por qué no, a proyectar tu mañana hoy.

Algunas de las ocupaciones emergentes del trabajo del futuro:

1. Programador de Apps móviles – La demanda se ha multiplicado por 17 en tan solo 5 años.
2. Desarrollador de soluciones Big Data y Sofware.
3. Especialista en Ciberseguridad (Hacker).
4. Curador de contenidos digitales, es alguien que encuentra, agrupa, organiza y comparte continuamente el mejor y más relevante contenido sobre un tema en línea.
5. Robótica.
6. Arquitecto de realidad virtual.
7. Programador HTML5.
8. Ingeniería ambiental.
9. Digital manager, SEO y SEM.
10. Traductores.
11. Abogados expertos en ciberdelitos.
12. Especialistas en experiencias de usuario o UX (User Experience). En 3 años se ha multiplicado por 3 la demanda.
13. Copywriter y redactor digital una de las profesiones hoy día más solicitadas.
14. Experto en edición de video

Algo que deberíamos respondernos con respecto al futuro del trabajo: ¿estamos preparándonos para un trabajo del siglo XX o del XXI?
Para terminar, aclaro que el contenido de este artículo no es una visión del futuro, más bien es una realidad del presente porque hoy es el futuro de nuestro ayer.

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Álvaro Martínez – Periodista y Máster en gestión del tiempo